Los Miserables (II): que Olimpo no pague traidores
Publicado por J. Parra El Noviembre - 15 - 2009
El XVIII Congreso del PCE se clausuró con una apuesta clara por la Reconstrucción y la Unidad, y una imagen de calma de cara al exterior, que aunque importante para el futuro de los comunistas españoles ante la sociedad, no puede desviar nuestra atención a la hora de abordar la solución de una serie de conflictos y las importantes tareas de fortalecimiento de la organización en toda España.
La inquietud por la presencia de determinados “camaradas” en el Comité Federal ha levantado alguna que otra ampolla entre militantes, dirigentes e incluso federaciones del PCE, que asisten con escepticismo a que quienes no han dudado en determinados momentos en enfrentarse al PCE, estén ahora en la dirección del Partido, con la “excusa” de hacer una apuesta por la unidad. Es mala cosa fiarse de traidores y vividores. Si Roma no paga traidores, Olimpo tampoco debería hacerlo. No sea que más pronto que tarde volvamos a encontrarnos con una Rosa Aguilar, un Llamazares o una Cristina Almeida de turno.
Este Congreso no aprobó la recuperación del centralismo democrático, ni el marxismo-leninismo, pero aprobó una enmienda transaccional que quizá sea más adecuada a la realidad actual del Partido. Personalmente me hubiera gustado que se hubieran votado las enmiendas en ese sentido, y estoy más que seguro que el resultado habría sorprendido a más de uno. Adonde quiero llegar es a que este Partido debe exigir disciplina de una vez por todas a quienes actúen en los frentes de masas, y dejar fuera a quienes se atrevan a enfrentarse en ellos a la posición adoptada en los órganos del Partido, y por supuesto, a quienes alimenten a los liquidadores del PCE.
En “Los Miserables (I): anticomunistas en IU“, me refería a una serie de conflictos como los de Asturias, Salamanca o Extremadura, y criticaba el hecho de que las direcciones de IU utilizaran a Cayo Lara para aplastar comunistas. Desconozco la facilidad o dificultad de Cayo Lara a la hora de abordar determinadas cuestiones territoriales, lo que si que tengo meridianamente claro es que es la dirección del Partido Comunista de España la que no puede permitir de ninguna de las maneras que el Coordinador General de IU, sea quien sea, sea utilizado para esos miserables menesteres. Porque no olvidemos que es obligación de dicha dirección asegurarse de que se respeten los derechos de todos y todas sus militantes. Y tampoco olvidemos que en el XVIII Congreso se aprobó una disposición que señalaba que en los territorios donde no se solucionaran los conflictos, la apuesta electoral de los comunistas podría ser distinta a Izquierda Unida, con lo cual nos encontraríamos de nuevo ante una situación de alta tensión dentro de la organización.
Por tanto, creo que para cualquier comunista debe estar el PCE por encima de IU, siempre. Debe estar la Reconstrucción del PCE por encima de cualquier otra prioridad, siempre. Deben estar los camaradas por encima de los “compañeros”, siempre. Deben estar los militantes honrados por encima de los vividores, siempre. Y que con vividor se de por aludido quien quiera, somos muchos comunistas los que estamos dispuestos a denunciar en los órganos y en cualquier sitio a los miserables que se atrevan a enfrentarse y a intentar liquidar al Partido Comunista de España. Confío y espero que este Congreso de Unidad y Reconstrucción nos ponga a todos a trabajar en el sentido del fortalecimiento del PCE, y confío en que no se tenga ningún miramiento con los liquidadores. Muchos, no lo vamos a tener.
* Olimpo es la calle donde está ubicada la sede del Partido Comunista de España
Publicado por J. Parra El Noviembre - 15 - 2009
El XVIII Congreso del PCE se clausuró con una apuesta clara por la Reconstrucción y la Unidad, y una imagen de calma de cara al exterior, que aunque importante para el futuro de los comunistas españoles ante la sociedad, no puede desviar nuestra atención a la hora de abordar la solución de una serie de conflictos y las importantes tareas de fortalecimiento de la organización en toda España.
La inquietud por la presencia de determinados “camaradas” en el Comité Federal ha levantado alguna que otra ampolla entre militantes, dirigentes e incluso federaciones del PCE, que asisten con escepticismo a que quienes no han dudado en determinados momentos en enfrentarse al PCE, estén ahora en la dirección del Partido, con la “excusa” de hacer una apuesta por la unidad. Es mala cosa fiarse de traidores y vividores. Si Roma no paga traidores, Olimpo tampoco debería hacerlo. No sea que más pronto que tarde volvamos a encontrarnos con una Rosa Aguilar, un Llamazares o una Cristina Almeida de turno.
Este Congreso no aprobó la recuperación del centralismo democrático, ni el marxismo-leninismo, pero aprobó una enmienda transaccional que quizá sea más adecuada a la realidad actual del Partido. Personalmente me hubiera gustado que se hubieran votado las enmiendas en ese sentido, y estoy más que seguro que el resultado habría sorprendido a más de uno. Adonde quiero llegar es a que este Partido debe exigir disciplina de una vez por todas a quienes actúen en los frentes de masas, y dejar fuera a quienes se atrevan a enfrentarse en ellos a la posición adoptada en los órganos del Partido, y por supuesto, a quienes alimenten a los liquidadores del PCE.
En “Los Miserables (I): anticomunistas en IU“, me refería a una serie de conflictos como los de Asturias, Salamanca o Extremadura, y criticaba el hecho de que las direcciones de IU utilizaran a Cayo Lara para aplastar comunistas. Desconozco la facilidad o dificultad de Cayo Lara a la hora de abordar determinadas cuestiones territoriales, lo que si que tengo meridianamente claro es que es la dirección del Partido Comunista de España la que no puede permitir de ninguna de las maneras que el Coordinador General de IU, sea quien sea, sea utilizado para esos miserables menesteres. Porque no olvidemos que es obligación de dicha dirección asegurarse de que se respeten los derechos de todos y todas sus militantes. Y tampoco olvidemos que en el XVIII Congreso se aprobó una disposición que señalaba que en los territorios donde no se solucionaran los conflictos, la apuesta electoral de los comunistas podría ser distinta a Izquierda Unida, con lo cual nos encontraríamos de nuevo ante una situación de alta tensión dentro de la organización.
Por tanto, creo que para cualquier comunista debe estar el PCE por encima de IU, siempre. Debe estar la Reconstrucción del PCE por encima de cualquier otra prioridad, siempre. Deben estar los camaradas por encima de los “compañeros”, siempre. Deben estar los militantes honrados por encima de los vividores, siempre. Y que con vividor se de por aludido quien quiera, somos muchos comunistas los que estamos dispuestos a denunciar en los órganos y en cualquier sitio a los miserables que se atrevan a enfrentarse y a intentar liquidar al Partido Comunista de España. Confío y espero que este Congreso de Unidad y Reconstrucción nos ponga a todos a trabajar en el sentido del fortalecimiento del PCE, y confío en que no se tenga ningún miramiento con los liquidadores. Muchos, no lo vamos a tener.
* Olimpo es la calle donde está ubicada la sede del Partido Comunista de España
No hay comentarios:
Publicar un comentario